Frases populares, historia y significado. Capítulo 2: «No hay mal que por bien no venga»
En Córdoba Info también hay mucha cultura general. En esta sección hablamos de los refranes tradicionales que se van repitiendo de generación en generación. Historia y significado.
«No hay mal que por bien no venga»
Es un dicho popular que se utiliza para expresar que, incluso en las peores situaciones, siempre hay algo bueno que puede surgir de ellas.
El origen de esta frase se remonta a la antigua China, donde se encuentra una historia que explica su significado. La historia cuenta que un granjero tenía un caballo que se escapó y fue a parar a las montañas. Cuando los vecinos del granjero se enteraron, le dijeron que era una mala noticia y que ahora tendría que trabajar más duro sin su caballo. Pero el granjero respondió: «No sé si es una buena o una mala noticia, solo sé que mi caballo se fue».
Al día siguiente, el caballo regresó a la granja con varios caballos salvajes que había reunido en las montañas. Los vecinos, al ver la riqueza que había adquirido el granjero, le dijeron que era una buena noticia. Pero el granjero, una vez más, respondió: «No sé si es una buena o una mala noticia, solo sé que mi caballo regresó con otros caballos».
Días después, el hijo del granjero estaba tratando de domesticar uno de los caballos salvajes, pero cayó y se rompió una pierna. Los vecinos, al enterarse, le dijeron al granjero que era una mala noticia que su hijo se hubiera lastimado. Pero el granjero respondió: «No sé si es una buena o una mala noticia, solo sé que mi hijo se rompió una pierna».
Unas semanas después, estalló una guerra en el país y todos los jóvenes fueron reclutados para luchar en ella, pero el hijo del granjero fue el único que no pudo ir debido a su pierna rota. Los vecinos, al ver que el hijo del granjero no había sido reclutado, le dijeron al granjero que era una buena noticia. Y el granjero, una vez más, respondió: «No sé si es una buena o una mala noticia, solo sé que mi hijo está aquí conmigo».
Esta historia, proveniente de la sabiduría popular china, ilustra el mensaje que se esconde detrás de la frase «No hay mal que por bien no venga»: que lo que parece ser un mal puede terminar siendo un bien, y viceversa. A veces, las situaciones más difíciles pueden llevar a oportunidades inesperadas, y a menudo es difícil saber si algo es realmente bueno o malo hasta que pasa el tiempo y se ve el resultado final.
